Si la pandemia está dejando una tendencia por excelencia en redes sociales, esa es el despegue de los directos de Instagram (‘IG Live’). El número de retransmisiones se duplicó en marzo, coincidiendo con el inicio del confinamiento por el Covid-19, y en abril no dejó de crecer: las visualizaciones han aumentado un 70%, según datos de Facebook, dueña de la plataforma.
La receta del éxito de IG Live tiene dos ingredientes principales, por un lado, ofrecer una interacción directa en tiempo real entre el emisor y los usuarios, y por otro lado, estar integrada dentro del formato de moda, Instagram Stories, al que ya dedicamos un post. Además, el hecho de emitir en vivo, con sus imperfecciones e imprevistos, es valorado por los usuarios como una muestra de cercanía y transparencia.
Los vídeos de IG Live, igual que Stories, son en formato vertical, y su duración máxima es de una hora. A medida que su éxito ha ido aumentando, Instagram ha añadido funcionalidades: ahora se pueden ver los directos también en el ordenador, no solo en la pantalla del móvil, y se pueden guardar durante 24 horas como una story, incluso indefinidamente en Instagram Tv, la plataforma de vídeos en diferido de la red social.
Iniciar una retransmisión es tan sencillo como clicar en la pestaña superior izquierda, con forma de cámara, y después ir a la opción de ‘directo’ al pie de la pantalla. Una vez iniciada la emisión, se muestra el número de espectadores (parte superior) así como sus comentarios y reacciones (en la parte inferior).
Recuerda que al terminar podrás elegir entre borrar el directo, publicarlo como una story (disponible 24 horas) o añadirlo a tu canal de Instagram Tv, para que esté permanentemente disponible.